Capítulo 21: Predicción
Aquella espada mágica intrigaba tanto al dios de los muertos, que le producía la necesidad de saber cuanto antes hasta qué punto llegarían los efectos de su poder.
-Hades: Señoras, lamento haber llegado...
-Moiras: Tarde! Sabíamos que lo harías.
-Hades: Por favor señoras, no empecemos con esto.
-Eris: Me temo que no nos habíamos visto antes. Soy Eris, la diosa de la discordia.
-Moiras: Ya lo sabemos.
-Eris: Imaginaba que dirían eso.
-Hades: Bien, queridas. Saben que siempre es un placer hablar con ustedes, pero necesito información acerca de...
-Moiras: Acerca de la espada definitiva. Ya lo sabemos.
-Hades: ¡Ya sé que lo saben! Pillé el concepto hace mucho. Ahora si pudieran darme algún dato interesante sobre la espada.
-Eris: ¿Estás seguro de que nos podemos fiar de estas brujas?
-Hades: Resultan bastante irritantes, aunque te aseguro que nunca fallan.
Un día como otro cualquiera en el país de Ooo. Finn, Jake y los demás celebraban una pequeña fiesta para celebrar... Creo que ni siquiera ellos sabían lo que celebraban.
-Jake: Mira esto tron, volando sobre Lady Arcoiris podemos ver todo el país de Ooo.
-Finn: Desde luego es genial, aunque empieza a hacer algo de frío. Pero hoy pienso decirle a Chicle lo que siento por ella
-Jake: ¡Ay Dioh Mio!
-Finn: Tranquilo compi, no creo que sea para tanto.
-Jake: No tiene nada que ver con tu suicida confesión, colega. ¡Mira eso!
Un gran número de Sincorazón se acercaban al grupo. Era un ejército enorme, dispuesto a invadir el país de Ooo.
-Princesa Chicle: ¿Qué serán estas criaturas?
-Marceline: Parecen Sincorazón. Mi padre me regaló uno cuando cumplí 100 años. Son unas criaturas muy chungas.
-Jake: Yo lo único que sé ¡Es que dan muy mal rollito!
-PEB: Pues yo me pienso enamorar de una de esas cositas, y me desmayaré por amor, y fingiré una súper muerte de un ataque al corazón total. (Sobreactuando) ¡Ay mi corazón! ¡Han super roto mi pobre corazón! Y muero.
-Don Polvorón: Pu-pues a mí me da miedo.
Don Polvorón estaba realmente asustado, el problema es que cuando un dulce se asusta, explota en mil pedazos. Esa fue la suerte del pobre Don Polvorón.
-Finn: ¡Nooooo! ¡Don Polvorón ha muerto!
Tras salir del bosque de Halloween, Jack y Sally se fijaron en que se encontraban en un lugar completamente desconocido.
-Merida: Dime huesitos, ¿Sabes dónde estamos?
-Jack: Si te soy sincero, creo que estamos totalmente perdidos.
-Sally: Será mejor que salgamos de aquí. Este lugar me da escalofríos, es como si los árboles se moviesen.
Entonces, ante los ojos de los indomables héroes apareció un extraño fantasma de entre los árboles.
-Sesshomaru: Ese ser huele a Naraku ¿Será un demonio nacido de él?
-Riku: No es un demonio, es un fantasma. Ya me enfrenté a él en alguna ocasión.
-Jury: Sea lo que sea, me temo que sus intenciones son evidentes. No intenta atacarnos, pero tampoco parece muy interesado en huir. Es más que evidente que lo que quiere es que le sigamos.
-Sally: Pero si lo que dices es verdad, lo más probable es que nos quieran llevar a una trampa.
-Jack: Es posible, pero tal vez esto nos ayude a saber dónde están los ciudadanos de la ciudad de Halloween.
-Merida: Entonces está claro. Tenemos que seguirle.
-Ryuk: Jeje. Van a seguir a esa criatura sin saber a dónde irán ni qué les pasará. Estos seres humanos son la leche.
En Hawaii, Lilo y Stitch habían huido hacia el bosque. Observaron que la extraña criatura que había invadido el pueblo los perseguía solo a ellos. Así que, para proteger a Nani, David y los demás, aprovecharon un descuido para alejarse de los demás y asegurarse de que estarían a salvo.
El monstruo no tardó mucho en detectar la posición de la niña y el extraterrestre. Cuando Stitch vio al monstruo intentó luchar contra él, pero estaba demasiado cansado para hacerle frente.
Entonces, por suerte para ellos, ocurrió algo muy extraño. Un círculo de fuego rodeó a la criatura, la cual empezó a asustarse. Cuando finalmente decidió huir, apareció una silueta, la de quien provocó el fuego.
-Lilo: ¡Es imposible!
-¿?: No. Pero se acerca mucho.
Cuando por fin pudieron verle la cara a su salvadora, descubrieron que era Kim Possible, una amiga que ya les había ayudado en alguna ocasión.
-Lilo: ¡Kim! ¡Me alegro de verte!
-Kim: Yo también me alegro de veros, chicos.
-Lilo: Kim, te agradezco que nos hayas salvado. Pero tenemos que apagar el fuego antes de que se extienda por todo el bosque.
-Kim: ¿Qué fuego?
-Lilo: ¿Qué? ¿Por qué ha desaparecido todo ese fuego?
-Kim: No era fuego de verdad, si no ilusorio. Los sincorazón no son criaturas demasiado inteligentes. Al haber visto el peligro, ha huido antes de valorar si era real.
-Lilo: Así que el ser que nos ha atacado se llama Sincorazón. Tengo una última pregunta: ¿Cómo has podido hacer un incendio ilusorio?
-Kim: Con la ayuda de mi compañero, Jim Hawkins.
El joven Jim saltó en aquel momento de su tabla de surf solar.
-Jim: Encantado, me llamo Jim Hawkins,
-Lilo: Yo soy Lilo.Y este es mi perro, Stitch.
-Stitch: Ho-ho-hooola
-Lilo: ¿Y dónde está tu otro compañero?
-Kim: Ron se encuentra en Noruega, haciendo unas pruebas con Justicia Global. Mientras está fuera, Rufus se queda conmigo.
-Jim: Bueno, ahora no tenemos tiempo. Tenemos que volver a la base ahora mismo.
Jim, Kim, Lilo, Stitch, Morfo y Rufus subieron a la tabla solar de Jim y abrieron un portal hacía el castillo Disney, sin ser conscientes de la situación en la que se encontraba el castillo.
Mientras tanto, En el Inframundo.
-Moiras: Veamos lo que podemos obtener sobre la Final Sword:
Creo que esta historia ya la conoces Hades. Sólo quedan 2 años para la alineación de los planetas. Cuando eso ocurra, soltarás a los titanes para vencer a Zeus. Con esta espada, no tendrás que esperar, pues en tus manos el poder estará. Podrás liberar al más poderoso ejército, podrás eliminar a tu hermano y serás el indiscutible Dios supremo, con el arma definitiva en tus manos. Mas deberás tomar cierta precaución, pues con tu victoria, llegará también tu perdición.
Con esas palabras, aquellas viejas brujas desaparecieron, dejando a Hades y a Eris solos, preguntándose qué quería decir que su victoria sería su perdición.
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